miércoles, 10 de septiembre de 2008

SAN ANTONIO DE LA FLORIDA
En esta parroquia, conocí hace 34 años, a Enrique y Rosario. Eran catequistas.
El día 13 de junio, fiesta de San Antonio, murió Enrique, después de varios años con alzehimer. Se fue apagando poco apoco. Rosario que ha estado muchos años enferma y al borde de la muerte bastantes veces le sobrevivio. Ayer , casi 3 meses después, Rosario se rindió y se fue con su marido.
Se casaron hace cincuenta y tantos años, y contando los años de novios han pasado 60 años de su vida juntos.
Cuando ocurre algo así, y se muere primero uno, debe ser como si al otro le cortaran la mitad de su vida, como si le arrancaran un trozo de su carne.
Eran malagueños, salerosos, graciosos, simpáticos. Rosario además todo un carácter, ya imagino , como regañará a Enrique, que la estará esperando.
A mi, lo que más me apena es lo poco que la he ido a ver ultima mente. Me entristece, porque me la perdido, no he podido gustar de sus chascarrillos, ni de su profunda interpretación del sufrimiento en la enfermedad.
Deseo, que no me ocurra esto otra vez.
Deseo, que las ocupaciones del día a día dejen lugar para visitar a las personas que quiero.
Deseo, poder relativizar y quedarme con lo realmente valioso.

6 comentarios:

Luis y Mª Jesús dijo...

No se si habrá sido casualidad, pero no me ha aparecido tu entrada del día 8 hasta hoy, quizá porque están muy relacionada con la que acabas de colgar. A veces no nos damos cuenta que el tiempo es un regalo que se nos da para cumplir nuestro destino. Nos empeñamos en emplearlo en actividades útiles en términos de productividad y consumo, cuando su mejor desdino es "perderlo" dedicándolo a las personas.
Muchas veces me revelo e increpo a Dios: ¿por qué no me das más tiempo o menos quehaceres?. Presiento la respuesta: Te sobra tiempo para lo que "realmente" tienes que hacer, lo que ocurre es que no das prioridad a lo importante.
En fin, solo me queda pedir sabiduría para emplear el tiempo.
Un abrazo
María Jesús

CRIS dijo...

No te agobies...seguro que lo mejor de tí ella ya lo recibió. Y ahora, desde el Cielo, seguro que también se acuerda de vosotros e intercede.

BEsos...

P.D.: Te he dejado otro pequeño premio...mientras medito tu "propuesta"

Abu Saif al-Andalusi dijo...

Irache (tu nombre me recuerda el maravilloso año que pasé en Estella)
Hay que seguir con la batalla.
Aqui estoy otra vez.
http://elbaluartedeoccidente.blogspot.com/2008/09/una-gran-masacre.html
Un saludo
Abu

Ludmila Hribar dijo...

Hermosa aunque sea triste historia. Triste porque la vemos con ojos humanos, ellos ya juntos disfrutaran de otra vida y desde alli te miran con cariño leyendo todos tus recuerdos, intenciones y penas sonriendote. No te apenes estan contigo, y te siguen acompañando. Prueba de ello es que los recuerdas. Un abrazo.

Agnus dijo...

Gracias por vuestros animos.
Lo que me da pena es afanrme por cosas tontas y perderme otras importantes.
Yo sé que ellos sabian que les queria,bueno , que les quiero, al igual que ellos a mi.
Tambien sé que en el cielo tienen gran trabajo con los de aquí.
Gracias a todos.
Besitos.

familia sin apuros dijo...

Irache, en el cielo tienen mucho más trabajo que aquí. Tienen que velar por los que se quedan...